Inconformidad
En Villavicencio, los avances en bienestar animal se han detenido bajo la administración de Alexander Baquero, según denuncias de activistas sociales. Una defensora de los derechos de los animales señaló que, aunque el alcalde asumió su mandato prometiendo una transformación de la ciudad bajo el lema “Villavo somos todos”, no todos los sectores, ni todos los habitantes, se sienten incluidos en su gestión.
Uno de los casos más preocupantes es el Centro de Bienestar Animal, un proyecto que al iniciar la administración Baquero presentaba un avance físico del 95% y financiero del 89.9%, pero que permanece paralizado desde el 2 de febrero de 2024 debido a conflictos administrativos no resueltos en más de 300 días.

La activista recalcó que, si bien el centro no resuelve problemas estructurales como el abandono, el maltrato y la proliferación de animales, sí representaría un avance significativo en una ciudad que cada semana reporta decenas de casos de animales en estado de vulnerabilidad. Según datos de organizaciones locales, más de 1.500 animales domésticos viven actualmente en hogares de paso y albergues, situación que urge soluciones inmediatas.
Críticas a la administración Baquero
La defensora acusó a la administración de falta de voluntad política para concluir un proyecto que requeriría tan solo un 5% adicional de ejecución. Con palabras contundentes, afirmó:
“Los animales no pueden seguir siendo un fortín político que solo importa en campaña. A la hora de concretar cambios reales, parece que la decisión es no terminar aquello que no empezó su gobierno”.
Por su parte, colectivos animalistas de Villavicencio también hicieron un llamado al alcalde para que deje de mirar al pasado y se enfoque en finalizar esta obra, que podría destacar como un logro de su administración si se prioriza. Un vocero del colectivo expresó:
“Villavicencio necesita voluntad política no solo para construir obras de cemento, sino también para generar amor y cuidado hacia los animales no humanos. Es hora de demostrar que el progreso también incluye a quienes no tienen voz”.
La comunidad espera respuestas
El estancamiento del proyecto ha generado malestar en la comunidad animalista, que sigue esperando que la administración reactive un proyecto que podría marcar un antes y un después en la protección animal en la ciudad. Los colectivos enfatizan que no se trata solo de una obra física, sino de un mensaje claro de que el bienestar animal también es parte del progreso.